El cash pooling (cuya traducción al castellano es algo como “gestión centralizada de la tesorería”) es una herramienta muy útil para las empresas dentro de su cash management. Sin embargo, en muchas ocasiones, supone un verdadero quebradero de cabeza para los departamentos de tesorería, ya que su implementación es compleja y requiere de mucha intervención humana si se realiza de forma manual.
Por suerte, la tecnología actual ofrece soluciones efectivas para automatizar el cash pooling y hacer que su gestión sea mucho más eficiente y efectiva.
El cash pooling es una técnica utilizada por las empresas para optimizar la gestión de su tesorería, especialmente en grupos que cuentan con filiales o sucursales, ya sea a nivel nacional o en el extranjero.
En esencia, consiste en consolidar los saldos de las cuentas bancarias de todas las sociedades que forman parte de una empresa en una sola cuenta maestra, para así tener una visión global del flujo de caja y poder tomar decisiones más informadas sobre el uso de los fondos disponibles.
Es un procedimiento que permite a las empresas maximizar la eficiencia de su tesorería, reducir los costes asociados a las operaciones bancarias y mejorar la gestión del riesgo financiero. Además, al centralizar los fondos en una única cuenta, se puede reducir la necesidad de financiación externa y aprovechar mejor las oportunidades de inversión.
En general, esta técnica es conveniente para empresas que tengan abiertas varias cuentas bancarias en diferentes entidades, y es todavía más eficiente cuando tales sucursales se encuentran en diferentes países.
Para entender el funcionamiento del cash pooling, pongamos un ejemplo práctico.
Imagina un grupo empresarial compuesto por tres sociedades diferentes, con dinámicas empresariales distintas.
Tanto es así que la sociedad A, por su actividad, mantiene saldos negativos. Como consecuencia de ello, en la cuenta del debe de esta cuenta figura una deuda de 200.000 €.
Por contra, las sociedades B y C tienen saldos positivos en sus cuentas bancarias de 300.000 y 500.000 €, respectivamente. Por tanto, la empresa tiene un saldo bancario positivo y total de 600.000 €.
Gracias al cash pooling, los saldos de las tres sociedades se unifican en una única cuenta bancaria, dando como resultado un saldo consolidado por valor de 600.000 €. En realidad, las sociedades B y C han financiado a la sociedad A, para que esta no tenga que recurrir a financiación externa para obtener saldo positivo.
Así, la sociedad A soportará unos intereses mucho más reducidos que si acudiesen a financiación externa (y, por supuesto, de los que tendría que pagar por el descubierto de su cuenta bancaria), gracias a la financiación de las sociedades B y C.
Pero es que, además, el cash pooling permite a las empresas B y C obtener retornos más elevados de A que si se depositasen sus saldos en un depósito bancario.
Básicamente, existen tres tipos diferentes de cash pooling:
Las principales ventajas de la utilización de esta técnica son las siguientes:
Por contra, algunas de las desventajas del cash pooling son:
Si te estás preguntando si es posible automatizar un proceso tan crítico para la tesorería como el del cash pooling, tenemos buenas noticias.
Los últimos avances tecnológicos en los sistemas de gestión empresarial (ERP), unido a las capacidades digitales cada vez más avanzadas de las entidades financieras, han permitido que la comunicación entre empresas y bancos sea instantánea, lo que ha permitido la automatización de algunos procesos.
En general, estos sistemas permiten conectar las cuentas bancarias de las diferentes sucursales o filiales de la empresa en un único sistema centralizado y consolidar automáticamente los saldos en una única cuenta centralizada. De esta manera, la conciliación bancaria se realiza de una forma mucho más sencilla.
Además, estos software de tesorería permiten realizar los barridos entre las cuentas con la periodicidad establecida por el usuario. Así, ya sea con un barrido diario, semanal o mensual, el cash pooling se ajusta a las necesidades de cada empresa.
En resumen, la automatización del cash pooling puede mejorar significativamente la gestión de tesorería de una empresa, permitiendo una mayor visibilidad y control sobre el flujo de caja, reduciendo los costes bancarios y mejorando la toma de decisiones financieras. Existen diferentes herramientas y soluciones tecnológicas para automatizar el cash pooling, que se adaptan a las necesidades y presupuestos de cada empresa.
Por lo tanto, es importante considerar la automatización del cash pooling como una opción viable y efectiva para mejorar la gestión financiera de la empresa, especialmente en todo lo que tiene que ver con la gestión del efectivo.